Conclusión





Conclusión

 

La educación virtual, vista a través del modelo de Gilly Salmon, nos muestra cómo el rol del estudiante evoluciona a medida que avanzamos a través de las cinco etapas. Como estudiantes, es esencial adaptarnos a estas etapas y aprovechar al máximo cada una.

 

Nuestra identificación con un animal según el modelo de Salmon refleja cómo abrazamos estas etapas y cómo nos comunicamos en un entorno virtual. Esta analogía nos ayuda a comprender mejor nuestra dinámica como estudiantes.

 

En última instancia, la educación virtual es un viaje en constante evolución, y debemos estar preparados para abrazar cada etapa y crecer como estudiantes virtuales. El modelo de Gilly Salmon es una herramienta valiosa que nos guía en este emocionante viaje. ¡Sigamos aprendiendo y creciendo en el mundo de la educación virtual!

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